A margen de la Alameda, se desarrolló la pasarela Viva la Catrina, con diseños de Bobe D’león, quien explicó el significado de cada uno de los vestuarios, pues se inspiró en la naturaleza, complementando con el toque de fiesta, el colorido singular de México. Una representación del funeral prehispánico y danza autóctonas, dieciséis atuendos y la participación del grupo Luna y Agua, además el grupo Solovino, quienes brindaron un grato concierto de música ancestral. Fue una agradable tarde que la sociedad queretana disfrutó previó al Día de Todos Santos y Día de Muertos. Sin duda un mosaico cultural que nos da identidad.