LONDRES, 30 oct (Reuters) – El grupo angloespañol de aerolíneas IAG, propietario de British Airways e Iberia, dijo el viernes que está bajando su base de costes y pidió a los Estados que adopten sistemas de test de COVID-19 antes de la salida de los vuelos a fin de permitir la continuidad de los viajes durante la segunda ola de contagios que ha traído de vuelta los confinamientos a Europa.
“Instamos a los Gobiernos a que adopten procedimientos para realizar test antes de las salidas de los vuelos (…) y que también contemplen la opción de realizar pruebas posteriores a los vuelos para eximir a los pasajeros de las cuarentenas cuando procedan de países con elevadas tasas de contagio”, dijo Luis Gallego, consejero delegado de IAG, en un comunicado.
“Sin embargo, continuamos esperando que la demanda de pasajeros tarde al menos hasta 2023 en recuperar los niveles de 2019”, reiteró.
El grupo de aerolíneas angloespañol, que también es dueño de Aer Lingus y Vueling, anunció el viernes más detalles de sus resultados del período julio-septiembre tras haber comunicado la semana pasada una pérdida trimestral de 1.300 millones de euros, peor de lo esperado.
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(Información de Sarah Young; editado por Kate Holton; editado en español por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)