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El Banco de México (Banxico) considera que aun cuando la economía mundial se mantendrá estable en lo que resta del año y hasta 2019, el crecimiento en el país enfrenta un “complejo entorno” debido a que se desconocen las estrategias políticas y planes de la nueva administración de Andrés Manuel López Obrador.
“La falta de detalles acerca de las acciones que tomará la nueva administración en diversos ámbitos, también acarrea riesgos para la evolución de la demanda interna en la segunda mitad de 2018 y en 2019”, argumentaron los miembros de Banxico durante la Reunión de la Junta de Gobierno del Banco de México, en la decisión de política monetaria anunciada el 2 de agosto.
Los miembros asistentes a esa reunión, Alejandro Díaz de León Carrillo, gobernador; Roberto del Cueto Legaspi, subgobernador; Javier Eduardo Guzmán Calefell, subgobernador; Manuel Ramos Francia, subgobernador; Miguel Messmacher Linartas, subsecretario de Hacienda y Crédito Público, y Fernando Luis Corvera Caraza, secretario de la Junta de Gobierno, también creen que en este año se registrará una disminución del gasto agregado en el segundo semestre, como en periodos electorales anteriores.
Entre los riesgos para el crecimiento potencial de mediano y largo plazos, algunos miembros ven posible “la modificación de la postura fiscal por parte de la nueva administración, así como el deterioro en las condiciones de acceso de nuestro país al comercio internacional”.
La Junta de Gobierno del Banco de México también dijo que hay incertidumbre respecto de la renegociación del TLCAN y el futuro de los lazos con Estados Unidos, pero que también es previsible el crecimiento del Producto interno bruto (PIB) y se logre ubicar en la parte inferior del rango previsto en el último informe trimestral, de entre dos a tres por ciento.
Por último, también señalaron que hay inquietudes en relación a las medidas necesarias para incrementar la productividad de la economía mexicana y la adecuada utilización de factores productivos.
“Advirtieron que la información oportuna indica que en el segundo trimestre de 2018 la actividad económica en México mostró una contracción respecto al trimestre anterior. Dicha desaceleración parece estar haciéndose evidente tanto en los indicadores de oferta como en los de demanda”, refiere la Minuta número 61.
