Con más de un cuarto de siglo en el oficio, José Luis Gallardo asegura que la basura es un trabajo muy entretenido y socorrido, nunca falta, siempre hay alguien que necesita de estos servicios, y muchas veces entre los desperdicios “uno encuentra lo más inesperado”.
“La basura es una minita de oro. Por eso creo que no me equivoqué al dedicarme a esto, desde hace muchos años me ha dado para comer y para vivir”, aseguró.
Apostado con su carro de basura, separando con rapidez de entre los desechos, el cartón, aluminio, pet, botellas de perfume y fierro; el hombre de 56 años comenta que fue su padre el que le heredó el oficio.
De acuerdo con datos del Inegi, en México apenas se reutiliza 11 por ciento de las 104 mil 350 toneladas de residuos sólidos que diariamente se generan, pese a los beneficios que puedan obtenerse del reciclaje.
De lunes a sábado, poco después de las cuatro de la mañana, Gallardo llega a trabajar. Inicia con la recolección de basura en grandes y pequeñas bolsas, casa por casa.
El mercado del reciclaje en México tiene un valor potencial de 3 mil millones de dólares, con un crecimiento promedio anual de 10 por ciento, de acuerdo con estimaciones de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac).
Para José Luis, la costumbre y cercanía tan cotidiana con estos residuos, después de más de 25 años, hace ya imperceptible el olor, que más bien agradece a la suerte de encontrar objetos de mucho valor.
Con sólo estudios parciales de educación primaria, José Luis, asegura que el trabajo no es cansado, “empiezo a las cuatro de la mañana y antes del mediodía estoy de regreso en mi casa para comer”.
Recordó que otro de los negocios que le da este oficio es la venta de botellas de perfume, “cuando encuentro botellas de perfumes entre los desperdicios que me dejan, las separo, las limpio y los pongo en una bolsa aparte; por ejemplo los de la 212 de Carolina Herrera y las de Hugo Boss me las pagan hasta en 80 pesos”.
Destacó que los lunes son el día que hay más basura y luego baja poco a poco, mientras que el miércoles es cuando hay menos, “por semana me dan 40 pesos”.
La UNAM señaló que uno de los problemas que se enfrenta en México en materia de reciclaje, es que la infraestructura no es suficiente para procesar toda la basura generada en las ciudades, a pesar de ser un negocio sumamente lucrativo.