Al escuchar de contaminación la mayoría la asociamos con el exterior, a todo aquello que contamina el aire cuando vamos por la calle; sin embargo, no se habla mucho de la contaminación interior, un mal que afecta cada vez más.
Si eres trabajador, pasas jornadas largas en tu oficina y sufres irritabilidad, estrés, falta de concentración y gripe, debido que no hay una adecuada ventilación o por el polvo existente en los aires acondicionados en tu espacio laboral, podrías padecer el síndrome del edificio enfermo.
Las personas que laboran en espacios que no tienen la suficiente corriente de aire o cuentan con un sistema de ventilación que además no recibe mantenimiento, están expuestas a tener de manera frecuente molestias, como tos o alergías.
El experto en climatización y ventilación de áreas, Daniel Franco Morales, explicó que este síndrome “es, digamos, cuando una persona se enferma, está en tratamiento y de repente otra se enferma, así pasa el año y siempre hubo una persona enferma”.
El experto en sistemas de climatización señaló que esta “cadena” es producida en ocasiones debido a la calidad del aire que se respira dentro de los centros de trabajo, como las oficinas.
“En los filtros del aire acondicionado puede haber un montón de bacterias, de virus, partículas suspendidas; en los filtros se pueden quedar todas las partículas de esa tos o todo tipo de alergias, flotan y las absorbe el aire mediante los filtros”, destacó.
El especialista comentó que si los filtros no están limpios, o carecen del mantenimiento adecuado, estas partículas se reincorporan al aire que circula en las oficinas, produciendo así este síndrome del edificio enfermo.
“Estamos respirando, esto se traduce en que genera molestias, infecciones en las vías respiratorias, las personas con alergias o asma se vuelven sensibles”, puntualizó.
Franco Morales refirió que como son partículas imperceptibles, no es un tema al cual se le dé mucha importancia, no obstante, está presente de manera cotidiana en las oficinas, mismas que si bien pueden estar libres de calor, con el aire acondicionado, su uso genera otro tipo de problemas.
Además del polvo, los cambios bruscos de temperatura al entrar a un edificio, al cual son más susceptibles los niños y las personas de la tercera edad, es otra de las causas que pudiera dar origen al síndrome del edificio enfermo.
“Llegar del exterior a un lugar con aire acondicionado con la temperatura más baja genera molestias en garganta, nariz, vías respiratorias; te da como un resfriado, tos o terminas en el doctor”, subrayó.
En este sentido, la neumóloga pediatra del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), María del Carmen Cano Salas, expresó que es importante mantener limpias y ventiladas las áreas de trabajo, así como el hogar, para evitar la proliferación de los animales que viven en el polvo, como los ácaros.
“Que esté ventilado también ayuda a que no se genere humedad, disminuye problemas respiratorios, infecciones, es disminuir las cosas que se pueden acumular en el ambiente, principalmente polvo y hongos”, señaló.
Cano Salas explicó que los ácaros también pueden estar presentes en las oficinas, pues habiendo polvo, estos animales se acumulan en tapetes, alfombras, estantes, carpetas, archivos, entre otros lugares donde se acumule polvo.
Entre las enfermedades que pueden traer los ácaros del polvo están las alergias a nivel respiratorio, como rinitis alérgica, asma, y las propias a alergias a polvo.
Sin embargo, la doctora puntualizó que para que una persona desarrolle alguna alergia, deben existir factores genéticos, antecedentes de los padres alergias propias, entre otras.