Cualquiera que viaje en el transporte público se encuentra con una escena similar a esta: una persona sentada y dormida, con la cabeza apoyada en la ventana, abrazada a su mochila y a veces hasta con la boca entreabierta.
Dormir breves espacios durante el día y, sobre todo, durante los trayectos, refleja una mala calidad del sueño, aseguró el responsable de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, Ulises Jiménez Correa.
Indicó que dormir en lugares como el transporte público afecta también el descanso debido a los factores de movimiento y calor, “es sólo un pequeño paliativo, pero no nos va a resolver nuestra necesidad de dormir y descansar como en la noche”.
El doctor señaló que dormir en las unidades del transporte refleja que las personas no descansan bien, por lo que es necesario comprometerse a cambiar los hábitos, ya que “dormir durante el día puede servir, pero no como en la noche”.
“Dormir no es un lujo. Le damos más importancia al trabajo, a veces a la escuela, o cualquier otra situación, pero dormir es muy, muy importante, porque si no, no vamos a poder con las otras actividades”, recalcó.
El especialista expuso que alrededor de 45 por ciento de la población en México padece algún trastorno del sueño, es decir, cerca de 50 millones de personas.
Las personas duermen menos de lo que se recomienda, lo cual deriva en problemas de la salud y bajo rendimiento en las labores diarias o en los trabajos, y afecta también la vida personal.
“Las principales enfermedades que encontramos del sueño son el insomnio; en segundo lugar el ronquido y la apnea del sueño; y en tercer lugar los trastornos del movimiento”, explicó.
Estos padecimientos resaltan de un universo de 100 trastornos registrados.
Hay varios factores que causan problemas de insomnio, como el estrés, una mala alimentación y el uso de aparatos electrónicos, entre otros.
Mexicanos somnolientos
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, un tercio de la población adulta en México, que vive en áreas urbanas, padece trastornos del sueño, lo que genera enfermedades metabólicas,cáncer, cardiovasculares, obesidad, cansancio, fatiga crónica, ansiedad y depresión.
Luis Torre Bouscoulet, jefe de la Unidad de Medicina del Sueño del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, señaló que 50 por ciento de los mexicanos ronca, de los cuales un tres o cuatro por ciento va a desarrollar pausas en la respiración y sueño excesivo, llamada comúnmente “apnea del sueño”.
Afirmó que los trastornos son un problema de salud pública, por lo que se deben fomentar buenos hábitos de dormir, pernoctar tiempo suficiente; es decir, “no quitarle horas al sueño”. “Las consecuencias de dormir mal, afectan en el ámbito laboral, cardiovascular, así como en casi todos los aspectos de la salud física y mental”, subrayó.
Sobre el uso de medicamentos y la vinculación con adicciones, la doctora Yadira Rodríguez Reyes, médico neumóloga especialista en Trastornos respiratorios de la Unidad de Medicina del Sueño del INER dijo que en el caso de los niños no se deben prescribir estimulantes de manera indiscriminada, porque puede provocar problemas de hipertensión y mayor actividad.
Detalló que los dispositivos tecnológicos como la televisión, computadoras, celular, videojuegos e incluso plataformas de streaming, causan trastornos.
Por su parte, el doctor Alejandro Jiménez Genchi, miembro fundador de la Academia Mexicana de Medicina del Dormir explicó que el insomnio puede causar deterioro e implicaciones en el ámbito social, laboral, escolar o físico de las personas que lo padecen; sin embargo, sólo cinco por ciento acude con el médico para tratarse.
Editor y documentalista: Manuel Valdez Quezada Infografía: Martín Villanueva Diseñador: Giselle Brenes Delgado Fuentes: UNAM / OMS/ Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias/ Asociación de Internet MX / Notimex / Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos