Adiós a Rodolfo García Jaramillo

Hace unos días se dio la alerta de su desaparición pero el día domingo llegó la triste noticia que él… Rodolfo, el amigo, el mozo de espadas, el fotógrafo, el cámara, el carpintero, el pintor… El mil usos por qué en todo lo que podía y sabia, ayudaba a quienes se lo pedíamos.

Rodolfo, un compañero de la fotografía taurina que conocí hace casi veinte años, se fue, dejando una familia dolorida por su partida, amigos y gente que le conocíamos de igual manera, que la última corrida en que vimos su sonrisa que a todos nos obsequiaba fue en la corrida de rejones que con su cámara estuvo plasmando los momentos de ese festejo en Juriquilla.

De carácter humilde y sencillo, siempre en los mejores momentos del toro, sin duda un ser que se extrañara en los callejones de las plazas, tanto de la Santa María como de Juriqulla, ya que siempre tuvo un momento de ayuda para todos. Un saludo, un abrazo, unas palabras de reconforte para su gente allegada.

No solo una figura amerita unas palabras en una nota, hoy es un amigo a quien despedimos de una manera respetuosa y solemne, dejando de ser noticia pública y trágica, solo queremos que se otorgue un reconocimiento a la persona, al ser que se marcha y que deja un vacío en los corazones de quienes tuvimos la oportunidad de conocerle más de cerca.

Rodolfo, Rodó o Gaonyta como le gustaba que le dijeran, fue un amigo incomparable, que en su paso por los toros colaboró de manera excepcional cuando se le pidió, que en el centro taurino queretano fue uno de los compañeros que expuso sus obras y su adoración David Silveti, “El Rey” fueron de sus obras más reconocidas por la gente que le conocía.

Ahora solo queda guardarle respeto y recordarle en los momentos que dejó, con sus obras que por ser una persona sensible y humilde pocas oportunidades de figurar en este ámbito no tuvo oportunidad ya que como maletilla no pasó de ser un aficionado practico por falta de posibilidades, pero eso no lo detuvo y con su cámara por muchos años plasmó lo que él soñaba con ser, ese torero que fuera reconocido por las grandes masas y en su sueño se vio como el gran Rey, como El DAVID a quien fotografío en muchas ocasiones pero sin embargo su reconocimiento fue menor a la de una gran figura.

Que su familia y gente más allegada obtenga un momento de paz en sus corazones con su partida, que sea con profundo respeto estas palabras para que sepan que la gente del toro en esto estamos más unidos que nunca, que las penas son para compartirse y en esta ocasión les comparto el adiós de un amigo, de Rodó… Gaonyta, hasta siempre y que tu camino sea iluminado y séas llevado en hombros a tu descanso eterno, que en paz descanses amigo.