Lionel Messi regresó de una inactividad de casi dos semanas por suspensiones con un doblete y una asistencia, Luis Suárez agregó un tanto de chilena y el Barcelona noqueó el miércoles por 3-0 al Sevilla, pero su puja por la liga española encontró rápida respuesta por parte del Real Madrid, que también venció 4-2 al Leganés para seguir comandando la tabla de posiciones.
El Barsa trepó momentáneamente a la cima con 69 puntos, pero el equipo dirigido por Zinedine Zidane alcanzó luego los 71, y cuenta también un partido pendiente ante Celta de Vigo.
En su octava titularidad liguera, el colombiano James Rodríguez abrió el triunfo con su tercer tanto a los 15 minutos, pero Alvaro Morata (18, 23 y 48) fue la estrella del Madrid con un triplete que fulminó al Leganés, capaz de inquietar con tantos de Gabriel Pires (32) y Luciano Nieves (34).
“Nos metimos en dificultad con dos goles en dos minutos, pero conseguimos los tres puntos”, valoró Zidane, quien reservó a Cristiano Ronaldo y Gareth Bale, entre otros.
El Sevilla, que llegó a marchar segundo, acumula cinco fechas sin ganar y ocupa el cuarto puesto, el último que clasifica a la Liga de Campeones, con el Villarreal acechando a siete unidades.
“La alegría de querer seguir el paso de Barsa y Madrid es el precio de ahora. Nos está costando y tendremos que resolver en las próximas fechas”, dijo el timonel argentino, Jorge Sampaoli, a la vez protector de Messi. “No comparto que se critique al mejor del mundo, y más si es argentino. Es demasiada carga para nosotros”.
Messi y Suárez se encargaron de finiquitar el choque con una actuación demoledora, en que el uruguayo encarriló la victoria mediante golazo de chilena a los 25 minutos, antes de asistir a Messi para el segundo a los 28.
El rosarino, que jugó por primera vez en 13 días tras ser suspendido con la selección argentina por cuatro partidos y cumplir otra sanción por acumulación de tarjetas con el Barsa, sentenció a los 33 minutos, reforzando de paso su condición de máximo cañonero del campeonato con 27 goles, escoltado por los 24 de Suárez.
“La pelota venía en el aire y no quedó otro recurso que pegarle”, explicó Suárez. “Somos conscientes de que los viajes largos desgastan, pero es importante que los delanteros estemos cien por cien para los últimos partidos de la temporada”.
Descansado, fresco y hambriento de gol, Messi anunció su presencia con un zurdazo al travesaño desde la media luna, después de que Suárez protegiera y le entregara la pelota de espaldas al arco.
El Sevilla también dio muestras de peligro con un arribo de Steven N’Zonzi, en que el volante le ganó la acción al argentino Javier Mascherano, pero no al arquero Marc-André Ter Stegen, firme en el aguante.
Y en cambio fue el Barsa el que abrió el marcador con una antológica diana de Suárez, quien se inventó un acrobático remate de chilena desde el pico del área chica, tras anticiparse al argentino Gabriel Mercado y atacar con la diestra el balón elevado.
El centro lo puso Messi en eléctrica conducción frente a tres rivales, y el uruguayo le devolvió el favor con la asistencia del segundo, un pase atrás sin mirar después de que la defensa sevillista no lograra interceptar el cruce desde la izquierda de Neymar.
Sampaoli buscó soluciones, pero los recambios no llegaron a tiempo de evitar el tercero, nuevamente obra de Messi, implacable rematador de un mal rechace de su compatriota, Nico Pareja, tras la prolongación de un tiro de esquina.
Avistando sus próximos compromisos, ante el Málaga en el torneo doméstico y la Juventus en la Champions, Luis Enrique reservó a Suárez la última media hora y contempló desde la banca como su sustituto, Paco Alcácer, marró el cuarto en claro mano a mano con el arquero.
“La capacidad que tiene Suárez para usar su técnica, intuición y físico le convierten en el mejor ‘nueve’ del mundo”, se congratuló Luis Enrique.
La victoria del Madrid no resultó brillante, aunque sí balsámica a solo tres días de enfrentar al vecino Atlético de Madrid.
En brillante escapada individual, Marco Asensio entregó al primer gol a James, quien solo tuvo que empujar la pelota y, tras un zapatazo al poste de Danilo, Morata amplió consecutivamente, primero en cabezazo cruzado y bombeado, luego en disparo directo al rincón, tras meritoria descarga de Mateo Kovacic.
Pero, cuando el partido se antojaba de lo más plácido para los de Zidane, Pires remató un cruce de Diego Rico por la izquierda y Luciano pescó un cabezazo desacertado de Sergio Ramos en el área chica.
James, sin embargo, sirvió el cuarto a balón parado para Morata, antes de ser sustituido con visible fastidio.
La jornada también registró la victoria del colista Osasuna, 1-0 en cancha del Alavés; mismo resultado con que el Málaga se deshizo del Sporting de Gijón, también en zona de descenso junto al Granada, que empató sin goles con el Deportivo La Coruña.