Nueva York, 20 Feb (Notimex).- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora hoy el Día Mundial de la Justicia Social, y a inicios de año, afirmó que en América Latina, más de 25 millones buscaban empleo y la tasa de desocupación aumentó a 8.1 por ciento respecto a 2018.
El día se estableció con base a la adopción de la Declaración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre justicia social para una globalización equitativa, que buscaba garantizar el desarrollo mediante el empleo, protección social, diálogo y los principios fundamentales del trabajo, reportó la ONU en un comunicado.
Dentro de los avances mundiales que destaca el organismo están el crecimiento del empleo desde 2008 en un 0.1 por ciento anual, sin embargo, reconoce que al menos el 60 por ciento de los trabajadores carecen de un contrato laboral.
La OIT reportó el año pasado la necesidad de crear en el mundo al menos más de 212 millones de empleos para el mismo número de desempleados, y para 2030, al menos 600 millones.
El tema de este año es “cerrar la brecha de las desigualdades para lograr justicia social”, pues al menos uno de cada cinco trabajadores vive en pobreza moderada o extrema, se mantienen disparidades geográficas, disparidad de género y el poco beneficio social del crecimiento económico.
Respecto a la situación laboral en América Latina y el Caribe, la OIT regional afirmó en enero que se vive un momento de incertidumbre, reflejado en una leve alza de la tasa de desocupación regional e indicios de precarización que podrían empeorar este año.
La tasa de desocupación regional promedio estimada en la región a finales de 2019 es de 8.1 por ciento, una décima más que en 2018, lo que significa que más de 25 millones de personas buscan empleo sin conseguirlo.
La tendencia podría llegar hasta 8.4 por ciento al finalizar el año si el crecimiento económico sigue siendo moderado. Sin embargo, el Director Regional de la OIT, Juan Hunt, destacó que sin los avances de Brasil y México en la materia, la tasa de desocupación seria peor.
“Sin estos dos países, la región experimentó un estancamiento de la tasa de participación, una reducción de la tasa de ocupación de 0,4 puntos porcentuales para los primeros trimestres de 2019, y un aumento de la desocupación en torno a los 0,5 puntos porcentuales”, informó el informe anual de la Oficina Regional de la OIT de 2019.
Dicho documento también agrega que pese al persistente aumento de la participación laboral de las mujeres, que llegó a 50.9 por ciento al tercer trimestre de 2019, esta sigue estando más de 20 puntos por debajo de la masculina, que es de 74.3 por ciento.
Por otra parte, consideró “alarmante” la situación de los jóvenes pues hasta el tercer trimestre la tasa de desocupación regional fue de 19.8 por ciento, lo que implica que uno de cada cinco jóvenes en posibilidades de trabajar, no encuentran una opción. Este es el nivel más alto registrado en la última década.
“La falta de oportunidades de trabajo decente para los jóvenes causa gran preocupación pues es fuente de desaliento y frustración. Esto se ha visto reflejado en la primera línea de recientes protestas registradas en la región, pidiendo cambios para aspirar a un futuro mejor”, concluyó Juan Hunt.
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