La presentación de los testigos en el juicio contra Joaquín Guzmán Loera, definido como ‘el juicio del siglo’, será crucial para que los fiscales de Brooklyn acrediten las acusaciones formuladas contra el líder del Cártel de Sinaloa y para la defensa de ‘El Chapo’, que tendrá que remar contracorriente para demostrar la culpabilidad de su cliente.
Medios locales en Estados Unidos, como el New York Times, identifican a estas cuatro personas como los posibles testigos en el juicio contra ‘El Chapo’.
A continuación te decimos quiénes podrían atestiguar en el juicio:
Vicente Zambada Niebla
Es hijo de Ismael Zambada García ‘El Mayo’, uno de los principales dirigentes del Cártel de Sinaloa. En 2009, Vicente Zambada fue detenido el 19 de marzo de 2009 en México y posteriormente fue extraditado a Estados Unidos en 2010 para enfrentar cargos relacionado con el narcotráfico de los cuales se declaró culpable.
Damaso López Núñez
Fue comandante de la policía judicial en Sinaloa y agente del Ministerio Público. ‘El Licenciado’ ayudó en 2001 al ‘Chapo’ a escapar del penal de Puente Grande y tras la fuga, se incorporó al Cártel de Sinaloa, convirtiéndose en el hombre cercano de Guzmán Loera. En 2017 ‘El licenciado’ fue arrestado en la Ciudad de México y extraditado a Estados Unidos.
Damaso López Serrano
El ‘Mini lic’, hijo de Damaso López Núñez se entregó de forma voluntaria a las autoridades estadounidenses en 2017 y se declaró culpable de haber importado droga a Estados Unidos y reconoció haber sido líder de una facción del Cártel de Sinaloa. López Núñez es ahijado de ‘El Chapo’.
Los hermanos Flores
Los gemelos Pedro y Margarito fueron de los narcotraficantes más influyentes en Chicago a partir de 1998. Se aliaron con Joaquín Guzmán para intensificar el negocio de la droga en Estados Unidos, lo que los llevó a conocer a detalle las operaciones financieras y el movimiento de droga desde México. Sin embargo, por temor a ser capturados, ambos decidieron comenzar a cooperar con las autoridades de Estados Unidos en 2008, lo que los llevó a recibir protección por parte de Estados Unidos por el contenido y los detalles que ofrecieron sobre la estructura del Cártel de Sinaloa. En 2015, ambos fueron sentenciados pero su ubicación se mantiene en secreto debido a que forman parte de los testigos claves del gobierno estadounidense contra Joaquín Guzmán.