De acuerdo con el último registro del Instituto Queretano de la Mujer (IQM), en enero de este año fueron atendidas por la dependencia 182 mujeres violentadas, la mayoría víctima de violencia familiar, de forma física y por hombres.
El informe señala que 149 mujeres sufrían violencia familiar, lo que representa 82 por ciento del total de las atendidas por la dependencia, donde 19 reportaron violencia comunitaria, 11 en el noviazgo, dos laboral y una institucional.
Además, del total de las mujeres atendidas por el IQM, 60 por ciento fue víctima de violencia física, lo que representa 110 féminas, 71 sufrieron violencia psicológica, 32 sexual, 12 económica, siete patrimonial y tres de otro tipo.
El reporte generado por la dependencia estatal señala que de las 182 mujeres registradas, 138 fueron violentadas por hombres, es decir, 76 por ciento del total, 20 féminas fueron violentadas por su propio género y 16 desconoció el sexo de su agresor.
Casi 94 por ciento del total de las mujeres, es decir 170, conocía a su agresor, dos indicaron que lo desconocían y dos más se reservaron el dato. Además, sólo una de las 182 mujeres atendidas pertenece a un grupo étnico y 131 saben leer y escribir.
Según el rango de edad, 10 mujeres víctimas de violencia atendidas tienen entre cero y 10 años, 29 entre 11 y 20 años, 48 entre 21 y 30 años, 42 entre 31 y 40 años, 34 entre 41 y 50 años, nueve entre 51 y 60 años, cinco entre 61 y 70 años, tres entre 71 y 80 años, y 2 dos son mayores de 91 años.
El municipio con mayor registro de mujeres violentadas es Querétaro con 121 casos, quienes representan 66 por ciento de las féminas que se acercaron al IQM, le sigue El Marqués con 14 casos, y luego San Juan del Río con 11 casos registrados.
En cuanto lugar está Corregidora con 10 casos, en quinto lugar se encuentra Pedro Escobedo con ocho, el sexto sitio lo comparten Amealco y Tequisquiapan con cuatro casos cada uno, seguidos de Cadereyta de Montes con tres casos y Colón con dos.
Las tres mujeres restantes son residentes de los municipios serranos Arroyo Seco, Landa de Matamoros y Pinal de Amoles, según datos del informe del instituto.