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Militantes del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) evidencian confrontaciones por imposición y cambio de candidaturas sin consulta con las bases, lo cual ha suscitado fracturas que se están resolviendo en tribunales electorales.
En el Estado de México (Edomex), líderes cupulares de Morena cambiaron los resultados de al menos 83 de sus candidaturas a regidores, acusaron militantes.
A Blanca Rodríguez, regidora con licencia en el municipio de Tonanitla, la Comisión Nacional de Elecciones encabezada por la presidenta nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky, le quitó la candidatura a la presidencia de ese municipio, pese a ser dictaminada por la Comisión de Elecciones.
Los dirigentes estatales de Morena cortaron toda comunicación con ella, luego de que cuestionara la alteración de los resultados en el grupo de whatsapp “Candidatos Ayuntamientos”, donde Horacio Duarte, presidente estatal del partido, así como otros liderazgos, mantienen comunicación con los candidatos elegidos para pelear por una alcaldía en el Edomex.
Sólo un mensaje le notificó que había sido eliminada del grupo por América Rivera, secretaria de organización del Grupo de Acción Política (GAP), “tribu” de experredistas ahora miembros de Morena.
Blanca Azucena explicó que su caso no es el único. Afirma que se han violentado los derechos políticos electorales de varios militantes elegidos democráticamente o por estatuto: “Nunca hubo información clara y precisa que garantizara nuestros derechos políticos. ¿Dónde quedó la legalidad de un proceso interno, del respeto a los estatutos de Morena?”
Blanca ha sido señalada por haber impugnado la decisión ante el Tribunal Electoral del Estado de México, así como con la comisión de Honor y Justicia de Morena; en su partido, la han acusado por aferrarse a una candidatura de la que fue removida y que violentó el apartado T del artículo 44 del estatuto del partido sobre el proceso interno para puestos de elección popular:
“No creo recuperar la oportunidad de contender; y no es frívolo defender mis derechos políticos, es una lucha cansada, pero es una lucha digna, donde el espacio público es asignado para los varones y el doméstico a las mujeres. Por eso es importante que siga, porque esa estructura es terrible y me violenta”.
Blanca asegura que no sólo ha pasado por esta situación en Morena, sino también en su comunidad, donde otros militantes “al ver que defiendo mis derechos, dicen que es berrinche y ambición de poder”.
En Baja California
A mil 647 kilómetros del Edomex, en el municipio de la Paz, Baja California Sur, la morenista Diana Itzel Hernández también cumplió con el proceso interno para buscar ser candidata a diputada al cuarto distrito, e impugnó ante el Tribunal Estatal Electoral, que terminó por desechar su queja al determinar que Morena es libre de elegir el método para informarle la negación al derecho de audiencia solicitado, luego de su protesta por la supuesta imposición de Milena Quiroga Romero a la candidatura.
Según Diana Itzel, Quiroga Romero es “invitada” de Rubén Muñoz, candidato a presidente municipal de La Paz. “Ni siquiera estaba afiliada a Morena, sino al Partido Humanista. Eso es lo que yo estoy peleando, porque manipularon su fecha de registro de alta al partido, explicó.
Blanca Azucena en el Edomex y Diana Itzel, en Baja California Sur, son militantes de Morena que han alzado la voz por una posible violación a sus derechos políticos y que han impugnado ante tribunales y ante los órganos internos de Morena “contra el influyentismo dentro del partido”.
Diana Itzel afirmó: “Creo en los estatutos de Morena y su principios. Mi voto es para Andrés Manuel, pero a nivel local es diferente: hay una doble estructura. Yeidckol la regó al venir aquí y no llegar a conciliar y a unir. Creo que todos estamos peleando un derecho, a final de cuentas. Si nos basamos en las reglas del juego, esto es un cochinero. Si va a ser ‘dedazo’ que nos digan desde un principio”.
Acuerdos y descomposición
Un dirigente fundador de Morena en Edomex, quien se identificó plenamente pero solicitó el anonimato por temor a represalias, habló del interés del GAP, “tribu” creada en el PRD, trasladada a Movimiento Ciudadano y ahora instalada en Morena, de imponer su hegemonía dentro de la representación estatal del partido para lograr acuerdos con el gobierno de Alfredo del Mazo:
“Siempre acuerdan con el gobierno. Cuando Higinio Martínez fue candidato al gobierno del estado, acordaron con el gobierno; lo mismo pasó con Yeidckol Polevnsky cuando le tocó a ella ser la candidata”, señaló el integrante fundador del partido.
El político morenista aseguró que son las bases de Morena, gente que nunca había militado en un partido y algunos viejos experredistas que siguieron a López Obrador, desde los tiempos del desafuero, quienes han resistido.
En el Estado de México, donde el GAP es dominante, el dirigente asegura que es un “partido dentro del partido”; y que, en sus filas, Morena alberga a exregidores y exalcaldes “con señalamientos de corrupción, de facciosos. A eso nos enfrentamos”.
“Es un proceso de descomposición política muy profundo. Es un proceso de descomposición de la clase política en general, y Morena no es una isla. Si la clase política en el país, está en un proceso de descomposición, está descompuesto el PRI, el PAN, el PRD, Movimiento Ciudadano y Morena. No somos una isla y no podemos ser maniqueos”, dijo.
CAPITALMEDIA– ¿No sienten que López Obrador los abandona a su suerte?
Fuente– Sí, un tanto. Sí.
CM– ¿Por qué no has dejado el partido?
F– Porque yo confío en la gente. Más que en el partido. Yo confío en empujar un proceso.
