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El crecimiento industrial y desarrollo de algunos municipios ha derivado en un incremento en incumplimientos de contrato o estafas para la compra de terrenos a campesinos o ejidatarios, por parte de inversionistas, destacó el delegado de la Procuraduría Agraria en el estado, Reginaldo Rivera de la Torre.
Estos delitos se han registrado con mayor frecuencia en la zona conurbada a la capital del estado, en Colón, que incluso es considerado un foco rojo por la absorción del suelo social, y El Marqués, que en los últimos años ha alcanzado a posicionarse como el segundo municipio con crecimiento industrial y poblacional.
“Un foco rojo que tenemos en la absorción del suelo social, es Colón. La Peñuela y todos los ejidos cercanos a Galeras, están siendo adquiridos. Lo único que le digo a los sujetos agrarios es que lo eviten, porque es un patrimonio que les dejó la Revolución, pero cuando lo hagan, que o hagan asesorados para que no los roben, o que no malbaraten su tierra”, mencionó el delegado.
Destacó que existen inversionistas interesados en asentarse en el estado, que pretenden adquirir la tierra a precios “irrisorios”, considerablemente por debajo del costo real de los inmuebles ofrecidos por los ejidatarios.
Calculó que en el transcurso de un año atienden hasta 100 asuntos de diversa índole, y de estos, al menos el 20 por ciento están relacionados con este tipo de estafas a los ejidatarios.
“Es nuestro pan de cada día cuando inversionistas llegan y compran la tierra a precios irrisorios, en la zona de El Marqués y Colón, la tierra ya la están comprando hasta en 3 millones de pesos la hectárea, hay veces que les quieren dar 300 mil pesos”, detalló.
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