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La construcción de un rastro Tipo Inspección Federal (TIF) es inviable para esta demarcación, ya que un
centro con estas características generaría gastos de operatividad superiores a la capacidad económica de
la administración municipal y de los productores locales, aseveró el presidente de la Unión de Tablajeros, Alejandro de la Vega Chávez.
Recalcó que el espacio que se tiene actualmente es insuficiente para atender a los introductores de esta
región, sin embargo el proyecto que habría sido retomado en meses anteriores para convertir este lugar en
un rastro federal podría no ser conveniente para la demarcación.
Por este motivo, los integrantes de la Unión presentaron un proyecto que incluye obras para la modernización y ampliación del rastro, mismo que representaría un gasto de aproximadamente dos millones de pesos.
“Acabamos de presentar un proyecto de rehabilitación que tiene un monto de dos millones de pesos, esto incluye cambiar mucho equipo de acero negro por equipo de acero inoxidable, ampliar la sala de cerdos,
ampliar y modificar el área de corrales”, detalló el presidente de
esta agrupación.
Aseveró que esta carpeta se presentó en diciembre del año pasado, y que tras revisar el proyecto,
el presidente municipal, Guillermo Vega Guerrero, se comprometió a colaborar con recursos para esta
obra, una vez que verificaran la recaudación obtenida a través de la campaña de descuentos para los
contribuyentes cumplidos en el pago de predial.
Hasta la fecha, este proyecto no ha sido formalmente incluido en los planes para la ejecución de
obras públicas.
Son cerca de 150 introductores los que ocupan diariamente este rastro municipal, por lo que consideró urgente generar las modificaciones necesarias al lugar.
Incluso consideró necesario reubicar el rastro, para asegurar que amplíen las instalaciones del mismo.