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Jueves 21 de Noviembre 2024
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Luis se abrazó con su mamá... pero solo un ratito

Foto: Especial

30 de Agosto 2018
Su padre lo arrancó hace 38 días; Maritza lo vio ayer

Luis César y su madre se reencontraron; entre lágrimas, “apapachos” y caricias contenidas durante los 38 días que no se veían, ambos se fundieron en un gran abrazo que no deseaban terminara jamás.

Maritza por fin pudo ubicar a Luis en el Colegio Salesiano de la ciudad de Querétaro, tras un mensaje recibido en sus redes sociales, justo cuando se encontraba en los juzgados civiles y familiares de esa ciudad para solicitar el establecimiento del “régimen de convivencia o de visitas que le permitiera ver a Luis”.

Este mensaje llegó tras la difusión que tuvo su historia en los medios de comunicación, especialmente en CAPITALMEDIA, a donde se comunicó para compartir este emotivo y esperado encuentro con su único hijo, alejado de su lado por su padre contra su voluntad.

Con semblante triste y la voz baja, Luis César le confesó a su mamá que en todo este tiempo le prohibieron comunicarse con ella, además de que lo mantuvieron contra su voluntad en Querétaro, pese a que lo único que él deseaba era regresar a su casa en la Ciudad de México (CDMX).

De manera inmediata, y sin oportunidad de nada, el padre del menor, Luis Enrique Garduño Santos, quien también se encontraba en el plantel, llamó a una patrulla y a sus abogados, debido a la restricción que impusieron a Maritza.

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Los tres se trasladaron a los juzgados para resolver la situación legal del menor y que él, por propia voz, declarara ante la juez con quién quería estar.

Al llegar al lugar, con voz firme y segura, el infante aseguró al fiscal, la juez y sus padres que quería volver con su mamá.

Ante ello, la juez sugirió que, dado que Luis no está inscrito en Querétaro, y en un acto de amor para el menor, su padre le permitirá terminar su segundo año de secundaría con su madre, en la CDMX, donde Maritza ya lo tiene inscrito y, al concluir el ciclo escolar, se regrese a vivir con su padre, quien actualmente tiene la custodia del menor.

La respuesta del padre fue negativa: “No, el niño es mío; yo ya lo gané, ya tengo la parte legal; no entrego al niño”.

Deberán esperar a mañana para que una psicóloga determine los lazos afectivos que tiene con sus padres, lo cual podría influir para que el niño se vaya con su mamá o legalmente le permitan las convivencias en Querétaro.

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