Este miércoles, nueve aspirantes a la candidatura para presidir la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), acudieron a la Legislatura local para solicitar el registro, entre académicos, abogados y ciudadanos integrantes de asociaciones, que en su mayoría coincidieron en la necesidad de recuperar el prestigio del organismo.
Perfiles
La convocatoria cerró ayer a las tres de la tarde y por lo menos, se tiene el registro de 10 aspirantes, el primero acudió a solicitar la candidatura el pasado lunes, el cual es Sergio Arellano Rabiela, licenciado en Derecho por la Universidad Iberoamericana y fue profesor en la universidad Anáhuac del norte, en la Ciudad de México.
El segundo aspirante es Rogelio Estrada Pacheco, quien refirió que cuenta con más de 20 años de trayectoria en el área de Derecho, pues incluso tiene una maestría y fue vicepresidente del Colegio de Abogados Litigantes a partir de 1995.
Negó que es el candidato preferido del Ejecutivo y dejó en claro que confía en un proceso de elección pulcro.
Añadió que su prioridad son los indígenas, las niñas y los niños y los presos, además aclaró que eficientará las finanzas del organismo.
“Fomentar la cultura de la legalidad y los valores, buenos principios. El niño es mi interés, el adulto mayor es mi interés, el indígena, los medios de comunicación”.
Eva Araceli Moreno Porras es licenciada en Derecho y trabaja en empresas privadas, quien estuvo en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, ahora DDHQ.
“Considero que tengo los conocimientos, he estado luchando, preparándome, Querétaro es una entidad donde se respetan los derechos humanos, estamos buscando la fortaleza de la institución, buscar que se implementen nuevos programas y proyectos para que la sociedad participe”.
Víctor Manuel García Herrera, con formación en Derecho, acudió en compañía de su esposa Brenda Rangel, de la asociación Desaparecidos Justicia A. C. y cerca de 10 personas en apoyo, a quienes en un inicio se les cerró las puertas del Congreso del Estado, y posteriormente entraron al palacio legislativo, a entregar la solicitud.
“Mi intención es trabajar en conjunto, no confrontar, porque la confrontación no deja ningún resultado positivo”, comentó García Herrera, quien detalló que hay temas prioritarios para abordar desde la Defensoría como son los feminicidios y las personas desaparecidas.
Berenice Sánchez Rubio, es titular del órgano interno de control de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro y consideró que existen áreas de oportunidad para fortalecer a ese organismo.
César Pérez Guzmán es por segunda ocasión, aspirante al cargo y espera en que no se violen sus derechos, tras recordar que hace cinco años la edad le impidió ser candidato, lo cual ganó a través de un amparo.
“La DDHQ debe recuperar su estatura moral, la ha perdido, también estoy motivado porque este juicio constitucional se llevó a cabo con mucho éxito. No soy abogado. Hay temas importantes como la desaparición de personas, mujeres y niños, el feminicidio, la migración que se nos va a venir encima por el nuevo presidente de Estados Unidos, la pobreza, los ancianos, nos tienen como en calidad de bulto o que no servimos”, explicó el ciudadano.
Salvador Alberto Sosa Ocampo es abogado litigante y trabajó ocho años en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos; su propuesta es que la DDHQ evolucione y transitar a la autonomía.
Consideró que el cargo del defensor del pueblo debe durar tres y no cinco años, además está en contra de la reelección.
Arturo Vega, maestro de educación física puntualizó que en su profesión se ha dado cuenta de las injusticias que existen, por lo cual está interesado en el cargo y recordó que no es necesario ser abogado, porque “todo mundo tenemos derecho en poder participar y defender a toda la gente”.
Casi al cierre de la convocatoria, los diputados recibieron la solicitud de Mariana Ramírez y Juan Orlando Vilchis Cortés.