En la Sierra Gorda queretana existe un solo centro de rehabilitación contra las adicciones para cinco municipios que componen la zona y que suman un población que supera a los 93 mil habitantes.
Este centro se ubica en el municipio de Pinal de Amoles y trabaja en condiciones precarias y al implicar los tratamientos la participación de las familias resulta inviable para los serranos estar viajando a otros municipios.
“Hoy por hoy prácticamente todos los serranos que necesitan un tratamiento viajan a la capital”, indicó Guillermo Tamborrel Suárez, comisionado del Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECA).
Como parte de la Estrategia 2017 para Centros de Tratamiento Residenciales, el estado destinará 200 mil pesos para abrir otros dos centros de rehabilitación en la zona serrana, uno exclusivo para hombres, y otro, para mujeres, informó Tamborrel Suárez.
Otros dos centros serán instalados en la zona metropolitana, dado como están distribuidos hoy en día los centros existentes. También se destinarán 100 mil pesos para cada uno y uno será de atención exclusiva para hombres menores de edad, y el otro, para mujeres menores de edad.
El funcionario señaló que la CECA trabaja con las diputadas locales María Alemán Muñoz y Atalí Rangel Ortiz, emanadas del Partido Nueva Alianza (Panal) y del Partido Acción Nacional (PAN), respectivamente, para la elaboración de una nueva ley que plasme estas exclusividades de atención.
“Hacemos un llamado a todos aquellos centros o personas interesadas a que nos presenten un proyecto. Hay un Comité de cinco personas que además es supervisado por los mismos centros de tratamiento que tendrán la decisión de a quién se otorgan estos apoyos”, afirmó.
Para elevar la calidad de los tratamientos se hizo un esquema de distintivos para lo cual habrá tres categorías; los centros de rehabilitación serán apoyados económicamente para que puedan elevar su categoría y lograr obtener los tres distintivos.
Actualmente de los 90 centros de rehabilitación registrados en Querétaro sólo seis cuentan con el reconocimiento del Consejo Nacional Contra las Adiciones (Conadic), por lo que se busca que con estos distintivos por lo menos 40 tengan funciones de manera eficaz.
La población atendida en el estado por adicciones ronda en mil 800 internos, de los cuales 600 son pacientes psiquiátricos; del resto, 600 sí requieren un internamiento en un centro de rehabilitación y 600 sólo necesitan un tratamiento ambulatorio.
“Con estos distintivos será fácil identificar por medio de los familiares qué centro brinda mejor atención”, agregó Tamborrel.