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Hasta 116 de cada mil policías en Querétaro son víctimas de actos de corrupción, lo que coloca a la entidad en la quinta posición a nivel nacional en este rubro, según la Encuesta Nacional de Estándares y Capacitación Profesional Policial del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).
Esta encuesta, aplicada en 2017 y publicada recientemente, establece que en Querétaro hay hasta 116 víctimas de corrupción por cada mil policías durante el desempeño de sus funciones, lo que coloca al estado por encima de la media nacional en este rubro, que es de 90.
La Ciudad de México es la entidad federativa que presenta la tasa más alta en este rubro, con el registro de hasta 179 víctimas, bajo los mismos parámetros. Chihuahua ocupa la segunda posición con una tasa de 133, Michoacán la tercera (130) y Coahuila se encuentra en cuarto lugar en este tema.
Según la medición hecha por el Inegi, en Querétaro se registran hasta 105 sobornos por parte de ciudadanos por cada mil elementos de policía, siendo esta la principal forma de corrupción hacia los policías registrada en la entidad.
Este estudio se indagó también respecto a situaciones de extorsión al interior de las corporaciones de policía, que es de hasta 10 casos por cada mil policías, así como sobornos por parte de personal de la corporación, en cuyo caso la encuesta reporta cuatro bajo la misma proporción, sin embargo, estos conceptos tienen un margen de variación superior al 30 por ciento, según señala el Inegi.
De igual manera, se establece que en Querétaro 30 según la información obtenida a través de los cuestionarios aplicados en esta encuesta.
Agresiones
Respecto a los delitos o conductas antisociales que atentan contra los elementos de policía, en el estado se registran 532 casos, por cada 100 oficiales, lo que coloca a Querétaro en cuarta posición en este ámbito. Los estados con los índices más altos en este tema son la Ciudad de México, con una tasa de 1872, Michoacán (725) y Sonora (573).
Al menos el 64 por ciento de los elementos que fueron víctimas de algún delito o conductas antisociales, aseguran que sus agresores eran desconocidos.
Hasta el 19.3 por ciento de los elementos activos en el estado durante 2017 reportaron haber sido víctimas de discriminación por su trabajo, a través de actos cometidos por ciudadanos, compañeros o elementos con mayor jerarquía al interior de la corporación.
Al menos el 15.4 por ciento fue víctima de amenazas al interior de su corporación, por integrantes del crimen organizado, delincuentes o ciudadanos y hasta 5.8% de los oficiales que laboran en la entidad fueron víctimas de lesiones.
POR GABY HERNÁNDEZ