De diciembre de 2017 a la fecha se han registrado 3 muertes de internos en el Penal Varonil de San José El Alto, de los cuales dos fueron suicidios; al respecto, la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ) emitió recomendaciones por la falta de vigilancia y seguridad de los presos.
El expediente DDH/404/2017 indica que los decesos ocurrieron en diciembre del 2017 y en marzo del 2018. Mientras que el 31 de mayo, un interno del Cereso San José El Alto en calidad de sentenciado se suicidó en su celda.
En el primer caso, la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario informó que a finales de diciembre pasado, una persona privada de libertad del sexo masculino decidió quitarse la vida al interior de su celda en el Centro de Reinserción Social de San José El Alto, municipio de Querétaro.
Esto, derivado de la depresión que sufría cuando su pareja sentimental le dijo que no lo visitaría en prisión, tomando como evidencia una carta póstuma con dedicatoria a su familia.
La autoridad detalló que el custodio en turno, encargado del pase de lista, acudió a la celda del ahora occiso para hacerle entrega de sus alimentos en punto de las 6:00 de la mañana. Al llegar encontró al preso colgado con un pedazo de tela.
Se trata de un hombre que tenía 38 años de edad vinculado a dos homicidios, portación de armas de fuego y delitos contra la salud, quien fue asegurado por autoridades el pasado 5 de noviembre de 2017.
Otro de los casos ocurrió en marzo de este año, cuando un custodio del Cereso de San José el Alto encontró sin vida a un preso al interior de su celda.
De acuerdo a los reportes, el custodio encargado de la seguridad en el módulo que habitaba el interno, aproximadamente a las 3:40 de la mañana, al estar realizando su recorrido de vigilancia se percató de que el hoy occiso pendía del cuello con un pedazo de cobija.
La persona privada de su libertad tenía 42 años de edad y se encontraba bajo proceso por el delito de robo equiparado en el CERESO de San José el Alto, desde el 7 de febrero de 2016. En prisión, se le agregó el delito de secuestro calificado en su modalidad de secuestro exprés.
El último caso corresponde a un varón de 25 años de edad en calidad de sentenciado que el 31 de mayo pasado se encontró sin vida, quien pendía del cuello con un cable. El 8 de mayo pasado fue sentenciado a 50 años de prisión.
En los primeros dos casos, la DDHQ emitió recomendaciones por violaciones a los derechos humanos de integridad y seguridad personal. Este organismo advierte que existen barreras para dar atención perisológica a los presos, lo que dificulta la contención emocional.
La DDHQ refiere la vulneración al derecho de integridad y seguridad personal del resto de los presos en este penal, en por lo menos dos de los módulos.
La Defensoría recomendó aumentar la plantilla de psicólogos del Centro Penitenciario Varonil en San José El Alto, así como el monitoreo constante de los presos.
La Secretaría de Gobierno del estado anunció medidas para combatir la depresión de los presos, como programas que integren a las familias de estos.