El presidente de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), Miguel Nava Alvarado, desistió de ser ratificado en dicho cargo, afirmando que decidió no continuar con los procedimientos que emprendió para tal fin como lo fue un amparo ante un juez federal y recursos de revisión en la Mesa Directiva de la Legislatura del Estado.
Dijo que personalmente culminó con ellos, pese a que la autoridad federal había dado entrado a sus demandas de amparo, sin embargo, seguirá defendiendo los derechos humanos desde su despacho y como profesor universitario.
“No tengo interés ya en participar y estar a fuerza en la posición de presidente de la Defensoría de los Derechos Humanos; la trinchera para defender loa derechos humanos puede ser cualquiera, no necesariamente es una Defensoría y yo voy s seguir la lucha (…) yo mismo decidí no continuar con nada (…) me voy a dedicar en la defensa de los derechos humanos pero en los particular”, aseguró.
En este sentido, apuntó que el 11 de febrero entregará una Defensoría jurídicamente bien y en calma, entrega que ha venido entregando desde hace meses independientemente si se daba su ratificación o no.
“Yo tengo un periodo constitucional que hacer una de las funciones mordía les de un organismo público es el fomento a la cultura de la ley y el fomento al fortalecimiento de las instituciones además hay una ley de entrega recepción se puede incurrir en responsabilidades si no lo hago”, señaló.