La magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Consuelo Rosillo Garfias confirmó que la defensa del presunto responsable de la muerte de la joven Yosheline Arenas Heredia no buscó la reclasificación del delito de homicidio calificado a homicidio simple, por lo que continúa su proceso penal interno en el Centro de Readaptación Social (Cereso) varonil de San José el Alto.
“Recordemos que es un delito considerado como grave, y al ser un delito considerado como grave, no se le concedió el beneficio de la libertad (…) no se si tengan esa petición en este momento por parte de la defensa, las pruebas siguen desahogándose y la causa se sigue por homicidio calificado”, detalló.
Por tanto, informó que el proceso, que se sigue con el sistema tradicional, continúa en el desahogo de las pruebas correspondientes por parte del Ministerio Público (MP) y la defensa del imputado.
La magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) recordó que una vez que se le dictó el auto de formal prisión al presunto responsable de la muerte de Yosheline, se contaba con nueve meses para dictar la sentencia que va desde 15 hasta 50 años en prisión por el delito de homicidio calificado.
“Aquí es cuestión de que el inculpado pueda renunciar a sus plazos, y definitivamente en ese momento él no se ha manifestado por la renuncia, de tal manera al estar próximos al vencimiento de los nueve meses y si se encuentran pendientes pruebas por desahogarse se le preguntará si renuncia o no, pero él no se ha manifestado al respecto aún”, añadió.