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Este lunes, la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) suspende actividades para sumarse al paro nacional de universidades públicas, que tiene el propósito de exigir un presupuesto suficiente para las escuelas de educación superior en el país.
A través de redes sociales, la rectora de la UAQ, Teresa García Gasca, convocó a una concentración de la comunidad estudiantil y académica, en el marco de este paro, en la explanada de Rectoría, en punto de las 20:00 horas.
La intención es hacer una manifestación pacífica y exigir el respaldo para garantizar la operatividad de las universidades públicas en el país y el desarrollo de la educación en el nivel superior para la población.
Este paro fue convocado por la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (Contu), a partir de que 10 instituciones, entre las que se incluyen las de Morelos, Oaxaca, Nayarit, Tabasco, MIchoacán y Zacatecas, se declararon en crisis financiera.
La rectora de la UAQ reiteró el respaldo de la máxima casa de estudios queretana a esta movilización, por considerar urgente que las autoridades den una solución a los problemas financieros de estas instituciones.
Afirmó que, en poco tiempo, la universidad podría pasar por la situación que hoy encaran otras escuelas de educación superior del sector público en el país.
A mediados de septiembre, Teresa García advirtió que en un plazo máximo de tres años la UAQ podría enfrentar una quiebra técnica, lo que implicaría que no tendría suficiencia para solventar sus obligaciones con trabajadores y proveedores y, por lo tanto, se entorpecería su operatividad regular.
Las autoridades universitarias del estado han sostenido reuniones con los integrantes de la LIX Legislatura de Querétaro para solicitar que se apruebe el esquema de aportaciones equitativas entre el gobierno del estado y gobierno federal para el beneficio de la UAQ.
Luego de la toma de protesta de los diputados locales, la rectora presentó el diagnóstico y panorama financiero de esta institución para pedir su apoyo en la entrega de un presupuesto que cubra las necesidades de esta universidad.
Actualmente esta casa de estudios opera con cifras rojas, de ahí que se tenga prevista su quiebra técnica en tres años más, de continuar con los esquemas de aportación gubernamental vigentes.
Aunado a esto, en la plantilla laboral están suscritos al menos 900 elementos que están próximos a cumplir con su tiempo de servicio, y que podrán solicitar el trámite para acceder a su pensión por jubilación, lo que causaría mayor cargo al gasto corriente de la UAQ.
El esquema que deberán considerar los legisladores y el Gobierno del Estado, encabezado por Francisco Domínguez Servién, antes de la aprobación del presupuesto de egresos, es la aportación peso a peso para garantizar el aumento de recursos para esta universidad.
POR GABRIELA HERNÁNDEZ