Por Israél Yáñez
Elba Esther Gordillo Morales fue contundente al señalar que con su salida de la prisión la Reforma Educativa se ha derrumbado.
“Recuperé la libertad y la Reforma Educativa se ha derrumbado, deseo que este momento marque el futuro de mi vida, el de mis anhelos y el de mis esperanzas; la larga etapa de encierro fue también la de un duro y profundo aprendizaje”.
En lo que fue su primera aparición pública después de permanecer cinco años en la cárcel, la líder magisterial vitalicia llamó a la conciliación por el bien de México y sus niños, sin rencores del pasado.
“Hemos recibido una gran lección ciudadana lo que viene debe plantearse con cuidado, sin objeciones y sin odios; sin rencores por el pasado y pensando en el futuro, trabajando siempre por el bien de la patria; el pueblo y todos debemos de estar a la altura de esta nueva etapa de la historia de México”.
Hizo referencia a las traiciones en contra de ella y de los maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, pues quien tendría que defenderlos no lo hizo.
“…lamento también que algunas actitudes que se me atribuyeron hayan contribuido a que fuéramos un blanco fácil un chivo expiatorio al que se le culpó de todo, pero sobre todo, lamento que quienes deberían defenderlos no lo hicieron y nos traicionaron”, dijo ante un auditorio lleno de sus correligionarios.
A pesar de sus buenos deseos de conciliación por el bien de país, comenzó su mensaje a los medios de comunicación–en el que no aceptó preguntas– recordando que fue acusada por cuestiones políticas y que no se le comprobó ninguno de los delitos que se le atribuían.
“Aquí tienen la imagen que ha predominado por más de cinco años con respecto a mi persona, es producto de una persecución política de acoso e injusticia, producto de un expediente basado en mentiras y acusaciones falsas pare hacerme ver culpable de algo que no cometí…!soy inocente!”, enfatizó ante un auditorio enardecido.