WWW.CAPITALQUERETARO.COM.MX
La visita de la delegación encabezada por Chrystia Freeland, canciller canadiense, sirvió para refrendar la posición mexicana: el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) se deberá negociar entre tres socios, advirtió Marcelo Ebrard, propuesto secretario de relaciones exteriores del próximo Gobierno Federal, quien reconoció que la reunión fue productiva para ambos países.
En lo que coincidió la canciller Freeland al señalar –en un perfecto español– que “ha sido un honor estar aquí con el presidente electo y su equipo, tuvimos varias reuniones. Siempre un placer estar aquí en México con los amigos mexicanos”, indicó sonriente a los reporteros. Luego acudió a saludar a un grupo de los “voladores de Papantla” que estaban en la oficina del gobierno de transición.
El TLCAN es un asunto relevante en la relación bilateral, afirmó Marcelo Ebrard, pero existen muchos más temas que fueron abordados, como respeto a derechos humanos, protección laboral e inversiones.
Apoyo en infraestructura
En este sentido, adelantó que Canadá podría participar en proyectos de infraestructura nacional, en concreto el tren que correrá en el istmo de Tehuantepec para unir ambos océanos, lo cual dejaría fuera a empresas o el gobierno de Estados Unidos. Ebrard fue más allá, aunque aclaró que no es su tema; pero el próximo gobierno federal buscaría en el tren maya, participe Canadá con financiamiento gubernamental y con empresas asentadas en Mexico que podrían ampliar su capital en ese proyecto, como Bombardier.
Durante el encuentro se exploraron áreas de oportunidad para inversiones en el sector aeroespacial. La reunión entre ambos equipos se dividió en varias mesas de interés y la misión diplomática participó en el encuentro con Andrés Manuel López Obrador.
El propuesto titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) rechazó hablar sobre un bloque bilateral México-Canadá, para contrarrestar los aranceles dumping impuestos por EU a ambas naciones, a pesar de ser socios en el TLCAN, hasta conocer el ánimo de los negociadores que participarán en las reuniones.
“Después de mañana (hoy) ya podremos crear una línea; entonces hoy no lo tocamos ese tema en particular. No especulo, ya veremos qué sucede mañana”, pidió Ebrard Casaubón.
Tampoco se abordaron temas específicos como las minas, que son el principal destino de los capitales canadienses, seguramente será un tema para el futuro inmediato, atajó Ebrard.
La comitiva canadiense abandonó la casa del gobierno de transición y a diferencia de la parafernalia que acompañó al secretario de estado norteamericano, Mike Pompeo, con vehículos blindados y acompañados por escoltas del Estado Mayor presidencial, todos se fueron a bordo de una camioneta blanca, seguidos por un discreto convoy de guardias y dos patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México.
Visita oficial
El presidente Enrique Peña Nieto exhortó a Freeland, a continuar los esfuerzos bilaterales para concluir en el corto plazo, la renegociación “integral” del TLCAN con EU.
Minutos antes del mediodía, la funcionaria canadiense arribó a la residencia oficial de Los Pinos para reunirse, de manera privada.
La funcionaria llegó a la residencia presidencial acompañada por una delegación de funcionarios de alto nivel de ese país, la mayoría de ellos en carteras que incluyen el comercio internacional, finanzas, asuntos internacionales y el coordinador de la relación Canadá-EU.
Negociación trilateral
México y Canadá refrendaron el compromiso de mantener una modernización del TLCAN trilateral, desechando la posibilidad de negociar acuerdos por separado con su socio, la Unión Americana, como lo ha planteado el presidente Donald Trump.
“La esencia de este acuerdo es trilateral y seguirá siendo trilateral”, defendió Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, tras la reunión que sostuvo con Freeland.
La ministra también confió en que se obtendrá un “ganar- ganar” para los tres países; “es algo posible y lo tendremos”, afirmó justo antes de que se retome la negociación en Washington.
En la cita, donde también figuró el canciller Luis Videgaray, se acordó seguir con un flanco común México-Canadá, para buscar el beneficio de sus pueblos, sin ceder a las presiones estadounidenses en materia automotriz y sobre el establecimiento de una cláusula que finiquite un posible acuerdo en cinco años.
“Hemos tenido una conversación bilateral con Canadá, como tendremos mañana una entre EU y México, es un proceso que conserva su esencia, que es trilateral, entendemos los retos y las oportunidades y estamos listos para capitalizarlas”, señaló Videgaray.
Guajardo recalcó que “no hay que confundirse” con las reuniones que encabeza por separado México con sus dos socios, pues son parte del proceso integral, además afirmó que estas tienen en manos un mejor entendimiento, y reforzar la idea de terminar un tratado justo para todos los socios.
Al reconocer la simbiosis comercial que tiene con su socio canadiense, Videgaray sentenció que aunque existe una actitud positiva sobre los avances de las mesas de diálogo, indicó que se transita por una coyuntura donde se definirá si Norteamérica seguirá como un bloque regional poderoso.
