Miles de personas formaron ayer largas filas en las afueras del Museo de Historia Afroamericana, en Detroit, para dar el último adiós a la cantante Aretha Franklin, la Reina del Soul, quien falleció el pasado 16 de agosto; pero cuyo velorio/homenaje — que durará tres días, para que admiradores de todo Estados Unidos alcancen a llegar— se realizó hasta ahora.
El cuerpo de Aretha, quien tenía 76 años al morir, a consecuencia de un cáncer de páncreas, descansaba plácidamente en un ataúd abierto bañado en oro, en cuyo interior estaba bordada la inscripción “Aretha Franklin, Reina del Soul”. La intérprete lucía un hermoso vestido largo rojo y elegantes zapatos de tacón del mismo color. El féretro estaba rodeado por arreglos con cientos de rosas en tonos pastel que parecían moverse al ritmo de la música gospel que interpretaba un coro en forma casi ininterrumpida.
Fue una despedida digna de una reina. Una extraordinaria carrera de seis décadas convirtieron a Franklin en una de las cantantes más célebres de la Unión Americana, que se destacó también por su trabajo en favor de los derechos civiles.
Conforme avanzaba la fila y al aproximarse a la diva, gente que llegaba de lugares tan remotos como Las Vegas y Miami lloraba, se persignaba, inclinaba la cabeza y le lanzaba besos. Había quienes hasta repetían fragmentos de sus canciones.
Kelly Major Green, miembro de la junta directiva del museo, dijo que la intención era crear un ambiente digno y respetuoso, similar al de una iglesia, el lugar donde Aretha Franklin tuvo sus inicios en la música. “Quisimos ser un reflejo de la Reina. Es hermoso. Ella es hermosa”, dijo Green.
Con las piernas cruzadas a la altura de los tobillos, Franklin proyectaba tanto poder como comodidad, como lo hizo en vida, explicó Green. Los zapatos, en particular, muestran que “la Reina del Soul es diva hasta el final”.
Este jueves, el cuerpo será trasladado a la Iglesia Bautista New Bethel, el templo de su fallecido padre, el reverendo Clarence LaVaughn Franklin, que en la década de los 40 era considerado el predicador negro más famoso del país. Por la noche se realizará un concierto gratuito para recordar su legado, donde se esperan actuaciones de estrellas de la talla de Stevie Wonder y Jennifer Hudson.
Los homenajes acabarán el viernes con el funeral que se celebrará en el Greater Grace Temple, una iglesia de Detroit, donde en 2005 se desarrollaron las exequias de la activista Rosa Parks. Está previsto que lleguen a la ceremonia de despedida destacadas personalidades del mundo político, cultural y social de Estados Unidos.
La familia de Franklin ya ha anunciado que el expresidente Bill Clinton será uno de los oradores en la ceremonia, en la que participarán también una veintena de artistas, entre ellos Stevie Wonder, Faith Hill y Chaka Khan.
Franklin será enterrada tras el funeral del viernes junto a su padre, así como de otros miembros de su familia en el cementerio de Woodlawn en Detroit, ciudad en la que vivió desde que tenía cuatro años.