Luego de 10 años de impulsar acciones para frenar a los talamontes que acechan la zona de Perales, en San Juan del Río, para la explotación ilegal de recursos forestales, y tras la presentación de hasta seis denuncias para exigir la intervención de las autoridades, no se ha logrado la detención de los responsables por la pérdida de casi 40 hectáreas de bosque, destacó el exdelegado de esta comunidad J.
Dolores Zamora Ramírez.Aseguró que el grupo de ciudadanos que había apoyado los trabajos para limitar y denunciar a los responsables por la tala de árboles endémicos como encinos, madroños, pinos y pingüica, limitaron sus actividades debido a que no han obtenido respuestas de las autoridades.
Destacó que en los últimos años se presentaron cerca de seis denuncias ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Procuraduría General de la República (PGR), sin que ninguna procediera.
“Incluso una vez hicimos recorridos, logramos agarrar a uno de los que van a cortar los árboles en esta zona, logramos que elementos de la policía municipal de Amealco nos ayudaran. Lo detuvieron y se lo llevaron, pero no se le fundaron cargos.En menos de 24 horas, ya estaba li-bre”, comentó el exdelegado.
Aunque han tenido acercamientos con las autoridades para buscar que se castigue este crimen ambiental y frenar el daño que se ha provocado en esta zona boscosa del sur del municipio, colindante con Amealco.Esta parte boscosa tiene casi 240 hectáreas de extensión, por lo que se estima que casi una sexta parte de esta área se ha visto afectada por estas actividades clandestinas.
De manera constante, los habitantes han logrado presentar evidencias gráficas y testimonios de la tala de árboles, así como de la presencia de algunos hornos clandestinos en pleno bosque, y el paso de camiones de carga repletos de troncos.
JCA