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Por Yury García
GUAYAQUIL, Ecuador, 22 sep (Reuters) – La Armada del Ecuador dijo el martes que una flota pesquera, en su mayoría de bandera china, abandonó paulatinamente las costas cercanas a las Islas Galápagos y ahora está operando en aguas internacionales frente a Perú, tras meses de pesca en la zona que impulsaron críticas de grupos ambientalistas.
Más de 300 buques se asentaron desde junio en el límite de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Galápagos, una de las más ricas y diversas del plantea, para realizar faenas de pesca de calamar gigante en aguas internacionales, lo que despertó la preocupación del Gobierno ecuatoriano.
“Hemos hecho el monitoreo y sabemos que están en aguas de altamar frente a la Zona Económica Exclusiva de Perú, en su parte sur”, dijo Daniel Ginez, jefe de operaciones navales de la Armada del Ecuador, en una entrevista con Reuters. “Sabemos que están ahí, los tenemos monitoreados”.
“Es un proceso en que van desplazándose, van moviéndose, haciendo su labor, haciendo pesca (…) Más o menos por esta época empiezan su desplazamiento más hacia el sur”, añadió.
La flota pesquera internacional está presente desde el 2017 en las afueras de la zona protegida de Galápagos, atraídos por las especies marinas, que incluyen algunas declaradas en peligro de extinción.
En 2020 se registró una mayor cantidad de barcos pesqueros en comparación con años anteriores, según la autoridad naval.
“Con un número tan grande de barcos de pesca tenemos el riesgo de que ciertas especies se vean disminuidas, afectadas y asimismo por causa de unas, otras también sufran el impacto”, explicó Ginez.
Los ambientalistas han dicho que esta pesca permite a los barcos chinos aprovechar de las abundantes especies que salen de las islas y cruzan hacia altamar, poniendo en peligro al sensible ecosistema de las islas, que sirvió de base para la teoría de la evolución del científico británico Charles Darwin en el siglo XIX.
El funcionario dijo que ningún barco de la flota pesquera ingresó a las aguas jurisdiccionales de Ecuador mientras permanecieron frente a las Galápagos y que el abastecimiento de combustible lo realizaban periódicamente con tanqueros pertenecientes a la misma flota.
La presencia de los buques llevó a Ecuador a pedir ante organismos regionales un mayor control sobre algunas prácticas de pesca en aguas internacionales como los trasbordos, el abastecimiento de combustible y los sistemas de monitoreo satelital, que en algunos barcos fueron apagados durante su permanencia frente a las Islas, según el Gobierno.
China ha prometido una política de “cero tolerancia” frente a los barcos y ha propuesto una moratoria de pesca en la zona cercanas a Galápagos entre septiembre y noviembre.
“Nuestro requerimiento es que se haga la identificación de las medidas que nos permitan evitar la presencia de un número tan grande de embarcaciones de pesca, que sin duda alguna se puede calificar como embarcaciones que están depredando los recursos ictiológicos”, concluyó.
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(Escrito por Alexandra Valencia, Editado por Manuel Farías)
