Las transmisiones masivas del capítulo 130 de Dragon Ball Super en Latinoamérica comienzan a tambalearse, pues Toei Animation, la casa productora de la serie, informó este lunes que no ha dado su permiso para dichas exhibiciones.
“Toei Animation no autorizó estas exhibiciones públicas, no apoyamos ni patrocinamos ninguno de estos eventos. Ni Toei Animation ni nuestros títulos endosan o patrocinan a ninguna institución ni partido exhibiendo el episodio autorizado”, indicó la empresa japonesa en Twitter.
Los nipones señalaron apoyar los derechos de autor y proteger el trabajo de los realizadores, por lo que invitaron a los fanáticos a ver la pelea entre Goku y Jiren a través de las plataformas y televisoras oficiales y “que no apoyen exhibiciones ilegales que inciten a la piratería”.
En gobierno de Ciudad Juárez, Chihuahua, fue uno de los primeros en acceder a que la pelea fuera vista en la Plaza de la Mexicanidad.
El viernes pasado, Ciudad Madero, Tamaulipas, confirmó en la red social que el capítulo 130 de la saga será visto el 17 de marzo frente a la Plaza Gobernadores.
Los ciudadanos de Nuevo León y la Ciudad de México también han pedido que el episodio sea transmitido en la Macroplaza y el Ángel de la Independencia, respectivamente.
De igual manera en Puebla se había hecho la solicitud al Ayuntamiento mediante redes sociales; no obstante, no se recibió respuesta.
Comunicado oficial de @ToeiAnimation.#DragonBallSuper pic.twitter.com/qzvmpMrzUC
— Dragon Ball Super (@DBSuperOficial) 13 de marzo de 2018